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El extraño caso de un activista prodemocracia hongkonés que denunció que agentes de la China continental le habían engrapado las piernas como advertencia dio un nuevo giro el martes cuando la policía...El extraño caso de un activista prodemocracia hongkonés que denunció que agentes de la China continental le habían engrapado las piernas como advertencia dio un nuevo giro el martes cuando la policía lo detuvo como sospechoso de proporcionar información falsa.
Howard Lam acaparó titulares la semana pasada con sus llamativas acusaciones, que reavivaron el temor a interferencias de Beijing en Hong Kong pese a sus promesas de que el enclave conservaría una autonomía considerable tras ser entregada por Gran Bretaña en 1997. Sin embargo, la policía dijo que había lagunas en la historia de Lam.
“Los reportes de la víctima sobre sus actividades ese día y los resultados de la investigación no concuerdan”, dijo la policía en un comunicado. “En este momento, no hay pruebas de que nadie fuera detenido de manera ilegal en Hong Kong”.
Lam, de 42 años, pretendía enviar una foto firmada del astro argentino del fútbol Lionel Messi a Liu Xia, viuda del fallecido Nobel de la paz Liu Xiaobo, y comentó sus planes en Facebook. Más tarde dijo que había recibido una llamada a comienzos de la semana pasada en la que un conocido en el territorio bajo control directo de Beijing le advertía que no enviara la foto.
Lam dijo que el jueves, hombres desconocidos que hablaban mandarín lo secuestraron de una transitada calle en Hong Kong, donde se habla cantonés, y lo dejaron inconsciente. Dijo que lo habían golpeado y advirtieron que no ejecutara sus planes.
Además, dijo que le habían engrapado cruces en los muslos porque es cristiano. El activista mostró sus heridas a la prensa en una conferencia el viernes, rodeado por miembros de su Partido Democrático, antes de presentar un reporte ante la policía y recibir tratamiento en un hospital.
La policía dijo el martes que había detenido a Lam como sospechoso de dar información falsa para engañar a la policía, tras una pesquisa que incluyó revisar imágenes de cámaras en la zona.
El caso de Lam avivó la preocupación de que Beijing estuviera estrechando su control sobre Hong Kong, después de otros casos como la detención secreta de un grupo de libreros hongkoneses y un magnate chino-canadiense que sigue en paradero desconocido. En ambos casos se sospecha agentes de seguridad bajo control de Beijing los llevaron al otro lado de la frontera, incumpliendo la constitución hongkonesa.
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Kelvin Chan está en Twitter como: www.twitter.com/chanman
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