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El obispo de El Paso, Mark Seitz, y otros líderes religiosos solicitaron a funcionarios de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE), suspender la deportación de una mujer mexicana quien desde hace...El obispo de El Paso, Mark Seitz, y otros líderes religiosos solicitaron a funcionarios de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE), suspender la deportación de una mujer mexicana quien desde hace tres años solicitó asilo en Estados Unidos, luego de que su esposo fuera asesinado en México.
María Elena De Loera, temía por la seguridad de sus tres hijos tras la muerte de su esposo en Ciudad Juárez, Chihuahua, por lo que solicitó asilo en 2014. Su petición fue negada en el verano de 2015, poco después de que su hija Alia Escobedo, de ocho años de edad, fuera diagnosticada con cáncer.
Funcionarios de inmigración concedieron a De Loera la suspensión de la deportación mientras su hija recibía tratamiento contra el cáncer en un hospital de El Paso.
Desde entonces, la abogada de De Loera, Linda Rivas, ha solicitado cada año al ICE que reconsidere la renovación de su permiso y la revocación de la orden de deportación.
De Loera permanece en El Paso, cerca de su hija, obligada a portar un brazalete electrónico en su tobillo, para que las autoridades de inmigración puedan ubicarla todo el tiempo.
El obispo y otros líderes religiosos intervinieron este lunes a nombre de De Loera, sumándose a la petición de su abogada para pedirle a los funcionarios de ICE que detengan su deportación.
Esta es la primera vez que el obispo interviene directamente para tratar de evitar la deportación de un inmigrante.
"Creo que la responsabilidad de la iglesia es hablar el evangelio y hablar con la conciencia de la gente de nuestro país para llamarnos a algo mejor, para llamarnos a ser un lugar de compasión, incluso si tratamos estos complejos asuntos de inmigración ", dijo Seitz.
La abogada Rivas, el obispo Seitz y otros lideres religiosos sostuvieron la víspera una reunión de 45 minutos con funcionarios del ICE en el Centro de Procesamiento de Inmigración en El Paso.
Tras el encuentro, los funcionarios de ICE aceptaron la petición de suspender la remoción, lo que significa que van a considerar la evidencia presentada para decidir si De Loera puede permanecer en el país.
"Creemos que esto es una buena noticia y apreciamos la cooperación del ICE en este momento dado que María está al lado de su hija", dijo Rivas en declaraciones a la prensa en El Paso.
"Ellos tienen la comprensión de que este es un caso muy crítico y especial dada la condición de la hija", indicó.
Alia, quien es atendida en El Paso Children Hospital, ha sido sometida a ocho cirugías, algunas en su pierna derecha, pulmones y boca, para eliminar el cáncer.
En febrero pasado su cáncer entró en remisión pero volvió hacerse presente en tumores formados en sus pulmones. Alia ha entrado y salido de la unidad de cuidados intensivos del hospital.
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